Día 0 - Revelaciones de Casi Media Noche

By: Unknown on 10:26 PM

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Muchas personas comienzan a escribir un blog porque creen tener cosas interesantes que decir,  porque creen que son interesantes en sí, porque quieren hacerse famosos sentados en la sala de su casa comiendo Doritos o porque “necesitan desahogarse y no necesitan que nadie los lea… sólo quieren expresarse”. Si bueno, mi razón es muy diferente: no ir a gritarle a una persona en especial, en su cara, que su simple existencia me molesta.

A mis 23 años, me di cuenta (quizás muy tarde) que soy una persona con severos problemas de ira reprimida en cuanto a personas que han obrado mal hacia mi tierna persona (no soy tierna), y que soy incapaz de “no cerrar ciclos en mi vida”, ¿a qué me refiero? A que para mí, no funcionan los mantras tipo Paulo Coehlo u Osho en los que te aconsejan que simplemente dejes que el Karma actúe y tú sigue con tu vida, deséale cosas buenas a la gente, come fibra en el desayuno y te verás recompensado.

No.

Soy partidaria de que las cosas deben decirse de frente, de manera respetuosa y en el tiempo correspondiente porque, aceptémoslo, a menos que tengas Alzheimer, es muy difícil que se te olvide algo malo que te hicieron … más si eres mujer. Así que, como no puedo ir a gritarle a dicha persona la barbaridad de cosas que me vienen en mente cada vez que su humanidad se postra frente a mí, y ciertamente quiero ser una mejor persona para merecer la compañía de un hombre como Tom Hiddleston, he decidido encarrilar mi vida y canalizar mi odio hacia la única actividad para la que creo que tengo talento, escribir, y combinarla con la cosa para la que definitivamente NO tengo talento, manualidades y cosas creativas.

Así que… a lo largo de 365 días, intentaré con todo mi corazón subir una actividad, escrito, comida, reflexión, revelación, epifanía, dato curioso que sirva de algo al mundo… creativo y relevante para la vida de los que me rodean. Por 365 días, con una actividad a la vez, trataré de canalizar mi ira reprimida hacia cosas que siempre he querido probar o por lo menos intentar.

Deséenme suerte y si tienen alguna sugerencia de qué puedo hacer, pueden decírmela.